Un breve recorrido por un lugar que encierra misterio y desolación hace un acercamiento a la vida de una persona del común, pero que en su interior encierra una tragedia.
Desde una perspectiva técnica, nos encontramos con un manejo de cámara a través del cual se hace un recorrido periférico, logrando con un acercamiento pausado ubicar al espectador en una situación particular, de igual modo en la parte inferior izquierda de la pantalla se va presentando el nombre del canta-autor, segundo por el titulo del videoclip "Niña amada mía", luego la compañía productora y por ultimo quien lo dirigió. Empleando la tecnología 3D se atraviesa la pared hasta llegar al lugar donde se inicia la trama del vídeo.
Como si el muerto estuviera recorriendo los pasos de su vida anterior se observa en el vídeo cuando la cámara avanza por un lugar oscuro y como fuesen los ojos de una persona enfoca cada retrato de una persona feliz en un ambiente que aparenta ser un hogar tranquilo apoyado en la imagen de un esposo dedicado y amoroso; sin embargo en los diferentes planos se vislumbra un cambio de escena que conlleva al espectador al reconocimiento de un cambio en la historia, puesto que ya no se trata de un hombre feliz, sino todo lo contrario un hombre trastornado por la tragedia que vive. Diferentes imagenes llevan poco a poco al desarrollo de los acontecimientos, un camino de tierra conduce a una pala, mientras este hombre vive su mundo en el interior de su hogar, luego la transformación de la llama del fogón en una sirena de una patrulla de policía, permitiendo ver lo que sucede en el exterior, en donde la gente esta consternada y los policías recogen pistas de la tierra que parece ser la misma que se encuentra en aquel hogar.
Mientras tanto aquel hombre enamorado arregla a su esposa para una cena al mismo tiempo que los policías deciden irrumpir en el edificio, haciendo un recorrido por las escaleras hasta llegar a la puerta de aquel hogar aparentemente feliz, causando desaparición en el porque sabe que le arrebataran a su amada de los brazos y entonces....... con un grito de dolor y llanto le pide que despierte de su sueño eterno, inconsciente de que eso jamás sucederá, entonces la policía decide ingresar a la fuerza y sus rostros son de desconcierto con la imagen que están observando: un hombre con el cadáver de su niña amada, que suplica al cielo no se la arrebaten.
Alejandro Fernandez, el interprete de ésta canción aparece en el vídeo como una imagen imperceptible vivenciando las emociones de aquel hombre y transmitiéndolas a través de su canto, haciendo las veces de un narrador que al finalizar la historia el desaparece como un espíritu que yace en el cementerio.
El videoclip es impactante por su contenido y la forma en que es representado, logra que el espectador vivencia dicha situación.
El ser humano esta sujeto a diferentes mandatos de la vida, nadie tiene asegurado el momento de su muerte, pues el soplido de la vida puede terminar en un parpadeo. Por eso cada segundo de la existencia significa un segundo menos de vida que no hay que desaprovechar.